Vos sabés bien que la primera impresión es lo que vale. Todo lo que hagas en esa primera cita va a quedar más grabado en la mente de los dos que las canciones de Ricky Martin. Ok, coincidimos.
Vos ya sabés: bien vestidita, bien pintadita, un escotecito que asome un milímetro de globito para que el gordi vaya entrando en ebullición. Es un arado!!
IMPORTANTE: Tenés que mostrarte mejor que cuando lo ves cotidianamente. Tenés que sorprender y que él, al verte, piense: “Está mejor de lo que yo pensaba”. Además, su neuronita va a pensar que te pusiste linda para él. Listo, me compró con " ..su neuronita.."!!
Pero él también tiene que hacer los deberes. Si pispeás que se viene con la misma campera con que lo ves todos los días, dos cosas: o es un pobre diablo que tiene una sola campera o le importó tres cuernos ponerse más lindo para vos.
En cualquier caso, eso es para tomar un café y rajarse con la primer excusa que tengas a mano. Ah no, pero qué turra que sos ileana!!!!!
Ahora, si viene con una linda camisita, zapatitos lustrados, peinadito y campera que nunca le viste o un saco lindo, significa que el tipo se estuvo mirando al espejo para tratar de deslumbrarte o, aunque sea, esconder la busarda debajo de un atuendo como corresponde. Si, así *razonó* la novia del abogado de Barrio Parque, hablale ahora...
